Vancouver
A pesar de tener la posibilidad de quedarnos unos días más en Surrey en casa de Rafa y Rey, decidimos darnos el capricho de pasar un par de noches en un hotel. Hacer couchsurfing es divertido y siempre es una gran oportunidad para conocer gente, historias y de practicar el idioma, pero había llegado el momento en el que el cuerpo nos pedía estar un par de días de relax, a nuestro aire, sin tener que estar «de prestado» en casa de otro. Elegimos quedarnos en el hotel Ambassador en Granville Street, Vancouver. Esta iba a ser la primera vez en este viaje que pasaríamos una noche de hotel. Seguir leyendo